En Gil & Barreiro Abogados contamos con una amplia experiencia en el terreno del derecho mercantil, lo que nos permite asesorar y representar con solvencia todos los asuntos que quedan englobados en esta rama. De la docena de casos que podemos gestionar, los procedimientos concursales son uno de los más habituales. Muchos han escuchado la palabra pero, ¿cuándo una empresa entra en concurso de acreedores? Pasamos a explicarlo a continuación.
Claves sobre el concurso de acreedores para una empresa
En esencia, una empresa entra en concurso de acreedores cuando ya no puede hacer frente a sus deudas y los activos que posee ya no son suficientes para pagar, como dice el nombre, a sus acreedores. Se trata de un proceso objetivo el que intervenimos expertos en derecho mercantil para encontrar una solución a la situación financiera de la empresa y, en algunos casos, si la situación es propicia para ello, lograr su reestructuración o su continuidad en el negocio.
Concurso voluntario y concurso necesario
En nuestros despachos de abogados en Vigo, Madrid y Segovia gestionamos para nuestros clientes los dos tipos de concursos de acreedores que existen:
Concurso voluntario
Es aquel en el que la empresa decide solicitarlo motu proprio, debido a que reconoce que no puede hacer frente a sus deudas.
Concurso necesario
En el sentido opuesto encontramos el concurso necesario, al que se llega cuando es uno o varios acreedores lo solicitan debido a que la empresa no está cumpliendo con sus obligaciones financieras.
¿Qué ocurre cuando se inicia un concurso de acreedores?
Tanto si es voluntario como si es necesario, una vez solicitado un concurso de acreedores será un juez designado el que supervise el proceso, además de elegir a un administrador concursal que se encargará de gestionar los activos de la empresa y de negociar con los acreedores. Esta última también será la persona responsable de gestionar un plan de viabilidad para la empresa, que deberá contar con el visto bueno de los propios acreedores y del juez.
Si el plan es aprobado, la empresa puede continuar con su actividad económica, siempre y cuando cumpla con los términos acordados en dicha hoja de ruta. La situación más extrema se produce cuando el plan de viabilidad no es aprobado, ya que es algo que puede provocar la disolución de la empresa.
¿Necesitas un despacho de abogados para gestionar un concurso de acreedores?
En Gil & Barreiro Abogados contamos con tres despachos de abogados en España que cuentan con un departamento especializado en mercantil que te pueden ampliar todos los detalles acerca de cuándo una empresa debe entrar en concurso de acreedores, así como ayudarte en todo el proceso que se abre cuando esto sucede. Cuenta con nosotros si buscas atención experta y personalizada y con amplia experiencia en constitución, extinción y liquidación de sociedades.